Nadie se salva solo...

Nadie se salva solo...

En ocasión de visitar la Unidad Nº 10 del INR, Juan Soler, San José, tuvimos la oportunidad de conocer  los emprendimientos laborales que pueden ser parte del proceso de inclusión que acompaña la privación de libertad y que están pendientes por falta de los insumos necesarios. 

Juan Soler es un centro de reclusión de mínima seguridad con un enorme potencial para la explotación agropecuaria por parte de los internos, y que -para las mujeres que allí cumplen condena- la posibilidad de emprendimientos de costura requiere de insumos básicos que permitan su puesta en práctica.

Me atrevo a solicitar la colaboración de quien pueda acercarnos materiales (retazos, hilos y demás enseres), para que esta idea se haga realidad y podamos contribuir a la rehabilitación de quienes están en su última etapa de reclusión.

Desde ya muchas gracias!

Graciela Barrera

Nota: quienes puedan colaborar pueden acercarnos los materiales a nuestro despacho (205) del Poder Legislativo o comunicarse con nuestra secretaría para coordinar su retiro al teléfono directo 29248680, o los internos 3255 y 3732 del Edificio Anexo del Poder Legislativo.